viernes, 31 de octubre de 2008


Por fin se ha abierto un bar con las mínimas condiciones en Salamanca.
En la calle Empedrada (Al ladito de la Vaguada de Palma) podemos encontrar este "lounge" que combina perfectamente la mejor música jazz y chill out con la cocina de vanguardia.
A mi, personalmente su carta me encanta, con una decoración cuidada al detalle, luces, mesas, sillas y una buena elección de música.
A destacar dos detalles; sus vinos, exóticos, raros y deliciosos, que los puedes tomar en un sofá, como si estuvieses en tu casa, mientras picoteas en sus numerosos platos.
El segundo, es su reservado, donde puedes cenar sin que nadie te moleste, con un buen cava y una intimidad que no la ofrece ningún otro local en la ciudad.
Por si fuera poco, el Ganesha, lo llevan dos viejos conocidos de la noche, que han pasado la mitad de sus vidas poniendo copas a todo el que algún día se acercó por Camelot y el trato que ofrecen, está a la altura de su local, aunque Oscar, esté como una puta cabra.
Quizás se le podría poner dos pequeños inconvenientes; resulta deficiente la ventilación del reservado cuando las personas q lo ocupan fuman y una cena para dos, se aproxima al salario mínimo interprofesional (en el reservado).
Valoración:
Calidad/Precio: 8
Recomendable: Si

1 comment

Anónimo dijo...

En Salamanca ha habido bares con las "mínimas condiciones" toda la vida.

24 de junio de 2011, 14:00