lunes, 28 de septiembre de 2009

10 COSAS QUE NUNCA HARÍA

1. Apoyar una guerra
2. Tener un hijo con Belén Esteban
3. Ser cocinero antes que fraile
4. Tener una novia fea
5. Pelearme por un fuera de juego
6. Entrar en política
7. Dar un cigarro a un desconocido
8. Bailar salsa untado de mahonesa y mostaza
9. Traicionar a mi familia, mis amigos y mi pareja
10. Irme de copas con el novio de la Duquesa de Alba


10 COSAS QUE SI HARÍA

1. El amor
2. Abortar, si estuviese embarazado de Belén Esteban
3. Ser abogado antes que juez
4. Pasar por el quirófano para arreglarme los destrozos de la edad
5. Discutir por un fuera de juego
6. Pactar con el diablo para conseguir lo que quiero
7. Engordar facturas para engordar mi cuenta
8. Bailar como Emet el día del orgullo gay
9. Ayudar a mi familia, amigos y pareja
10. Irme de cena con todos los de antes y alguno más

10 COSAS QUE QUIZÁS HARÍA, O TAL VEZ NO

1. Cantar desnudo en Central Park
2. Compartir un porro con J.M. Aznar
3. Perder el juicio al volverme loco
4. Comprarme un Pequinés en Berlín
5. Acordarme de Dios cuando follo contigo
6. Pactar con Zapatero una rebaja en D&G
7. Probar vicios que aún no he probado
8. Curar un infarto al As de los corazones
9. Ponerme un escote palabra de honor
10. Dejar de escribir chorradas y tú, dejar de leerlas

sábado, 19 de septiembre de 2009


¿Qué nos ofrecen páginas como facebook, netlog, tuenti, badoo y asimiladas?
Una mierda, eso es lo que nos ofrecen. Nos han engañado y nos dicen que van dedicadas a conocer gente, a estar en contacto con nuestros amigos, con personas de nuestro pasado e incluso, nos cuentan ahora, que vamos a encontrar trabajo por ahí.
Todo mentira.
A quién conoces por estas redes sociales? A los cuatro pringaos que son amigos de tus amigos, con los que no vas a mantener más de tres conversaciones antes de mandarlos a la mierda porque no tienes nada de lo que hablar. Decidme, que le cuento yo a un amigo de uno de los treinta y seis que tengo agregados como amigos, pues absolutamente nada. Y no os engañaré, de esos treinta y seis que tengo en en facebook me sobran los treinta y seis. Al que le quiero decir algo ya le llamo y se lo cuento, a los demás, quizás haya perdido su teléfono.

En serio, que nos ofrece esas redes para que todos tengamos cuenta en alguna de ellas, colguemos nuestras fotos, contemos nuestras venturas y andanzas e intentemos entablar conversación con un tío que vive en Miami y que jamás le vamos a ver.
Quizás se me ocurran varias justificaciones. La primera que me viene a la cabeza es el evadirnos de nuestra rutina, de la necesidad de tener una vida paralela, un alter ego (leeros el libro, os decepcionará) unos amigos, un tema de conversación, algo, que nos haga olvidar nuestro trabajo, nuestros problemas y hasta nuestra pareja. Las otras dos razones que se me ocurren, tienen relación con esta primera, porque si nos olvidamos de nuestro trabajo, será durante ese tiempo, el de trabajo, en el que más nos metamos en estas redes, buscando a personajes que nos entretengan mientras las agujas del reloj van girando hasta la hora de salir y nos vayamos, quizás a tomar una caña con alguien que hayamos conocido en un sitio de estos, que no sea nuestra pareja, porque para eso también está ese invento. Para echar una canita al aire, de vez en cuando.

Ah! Por cierto, lo de encontrar trabajo, es mentira, no pongáis vuestro curriculum, ni vuestros datos, ni nada parecido, no os van a llamar, ni a ofrecer un suelo de dos mil euros al mes, tan solo, van a manejar vuestros datos, para venderos los productos que se publicitan algo más personalizados. Que no os engañen, que bastante lo han hecho ya, las redes sociales son una mierda, sin verdadera utilidad, un negocio en el que hemos caído y ahora no tenemos cojones a dejar, como el tabaco, exactamente igual.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Ni lo sé ni me importa era el título del segundo disco del “Ellos” un buen grupo de música pop ochentera de la capital de España, este país multinacional, definición de Joan Laporta, entra ya en política y que te den una buena hostia en las urnas y algún que otro friki que no tiene ni puta idea de lo que es la historia de nuestro país.
Pues eso, el título de ese segundo disco, ahora hago mío, dando nombre a este nuevo blog, que como no podría ser de otra forma, dedicaré a criticar todo aquello que me importa, lo que no me importa, de lo que sé o de lo que no tengo ni puta idea, porque lo mejor es criticar, como nos lo pasamos en este país de payasos criticando.
Ésta tarde era a Ortega Cano por zumbarse a una hembra cerca de los cincuenta, como si no se hubiese follado a nadie desde que murió la que tenía el cáncer, y no lo digo por Antonio David, que vaya si ganó el cuerpo de la guardia civil el día que lo expulsaron, sino por esa enfermedad, para cuya cura nos pedían colaboración la semana pasada, un montón de pesadas, para ponerte una mierda de pegatina y hacerte sentir, al menos por un día, buena persona.
Porque no nos engañemos, el cáncer nos importa una mierda a todos, especialmente si no lo tenemos, si lo tiene el vecino de arriba o un compañero de trabajo pensamos eso de pobrecito, pero nos da igual que se cure o no.
En fin, que me estoy desviando del tema, que no era otro que darte la bienvenida a este espacio, en el que espero no pases demasiadas horas, pero al menos, sí, un momentito.
Gracias por tu visita.

jueves, 10 de septiembre de 2009

Maquiavelo a mi lado un mierda, y punto en boca!!
Que me importa una mierda el mundo si no es mi mundo y yo no soy el protagonista. El que consigue los honores, los triunfos y por supuesto los fracasos, que de esos también hay muchos, casi uno por día desde que me desvié del camino, el que tenía marcado, por probar algo nuevo, diferente y que no son más que patrañas y cuentos inventados por lectores que solo quieren finales felices.

Pero los finales felices no existen, después de las perdices siempre llega la indigestión, el ardor de estómago, incluso para algunos, la diarrea. Ese torrente de mierda que suelo soltar por mi boca a todo que no postra a mis pies, a aquello que no comulga con mis opiniones, a todos y cada uno de los que leéis esta mierda, que no es más que lo mismo, una y otra vez.

¿Y para que coños me lees si hace meses que no te aporto nada nuevo? No ves que apenas escribo, que no tengo nada que decir y doy vueltas una y otra vez como una peonza, o el hijo de puta ese que busca a su padre en cualquier bar de esta vetusta ciudad.
Hoy te doy la oportunidad, te voy a hacer caso, a ti que me lees, te pido que mantengas o cierres este blog, de una puta vez, tu opinión, por una vez, la voy a tener en cuenta, tan solo por esta vez, ¿vas a perder la oportunidad? Espero tu decisión